Busco la lluvia en el norte de la Vía Láctea, donde las gotas caen hacia ninguna parte con la cadencia lenta y armónica del cristal líquido. Busco la lluvia que se apodera de los tejados y las calles, del aire y de tu aliento cálido y humeante. Busco la lluvia torrencial y desatada que drena el enfangado subconsciente, esa que repiquetea en el suelo bailando a ritmo de bossa nova.
Lluvia ingrávida y etérea, perfumada con lavanda, habitante del reino de la tristeza sabia, de la melancolía serena y la felicidad húmeda. Lluvia que cauteriza las heridas del alma provocadas por el odio ciego y por la soledad salvaje, y esa lluvia me indicará el camino hacia los Pirineos Catalanes, a Ordesa, a Donosti y al Botxo, a Cantabria, a Llanes, a Covadonga y a las rías gallegas, y por supuesto, espero mal tiempo.
en el Botxo ni las tormentas han acabado con este bochorno, este calor húmedo insoportable. tpc se han llevado las heridas del alma.
ResponderEliminarhoy, de momento, parece que nos ha dado una tregua.
abanico y mucha sombra.
besos.
Tranquilo, muchacho: en el norte la lluvia, esa señora esquiva, ya nos está visitando. Y se va el bochorno, y los calores insanos, y los turistas en bermudas...
ResponderEliminarY pronto llegará nuestro Señor el Otoño: alabado sea.
que la encuentres
ResponderEliminarLas raras veces en las que llueve aquí donde yo vido también me dejo sumergir en esas sensaciones que describes.
ResponderEliminarUn abrazo
que encuentres lo que esperas...me quedo con tu lluvia "torrencial y desatada que drena el enfangado subconsciente, esa que repiquetea en el suelo bailando a ritmo de bossa nova." Saludos
ResponderEliminarBonita canción.
ResponderEliminarSoy incapaz de escuchar música y leer al mismo tiempo.
Esta mañana estaba en Santander y ahora estoy en Lieja, así que un par de días más y ya habré cubierto mi cupo de lluvia, y eso que me gusta...
Pásalo bien.
Yo viajé al norte buscando fresco y me encontré una ola de calor: los dos "mejores" días de lo que va de verano- me dijeron...
ResponderEliminarNo tanto la lluvia real, esa que puede dejarte como una sopa, benefactora .
ResponderEliminarLa otra, que es capaz de lavarnos la cara y el cerebro,
que nos coloca alerta,
que no incomoda,
O aquella que surge caída de no se sabe dónde, estrellada y nos arranca risas.
No sabría a cuál abonarme.
Haces muy bien invocándola con un texto más que generoso, genial
Abrazos
Creo que eso que buscas esta en viella allí es donde la lluvia se convierte en el paraíso, es como brillantes muy finos con los colores del arco iris, yo tengo recuerdos muy bonitos de los pirineos.
ResponderEliminarEl olor de la tierra, mojada por las calles de adoquines, de los árboles mojados, en una habitación con las ventanas abiertas, escuchando las gotas caer abrazándote y amando desenfrenadamente, al ritmo de la tormenta. Huí huí.
Pásalo muy bien, y trae los mejores recuerdos para contárnoslo.
Muy bello.
Se te echa de menos por estos lugares
ResponderEliminarPero qué lugar más agradable. A ver si vuelves pronto y nos cuentas cómo es la lluvia. Dios, cómo la echo de menos.
ResponderEliminarSenses, dependiendo del estado de ánimo, todo se puede soportar, hasta la caló. Saludos.
ResponderEliminarPas, por fín el otoño, pero en el norte no son siempre 20 grados en verano, cuando llegó la vuelta a Bilbao habían 32 grados, en todas partes cuecen habas. Saludos.
Pon, decían que estaba allí y era cierto. Saludos.
Kalina, hay algunos estudios sobre la lluvia y la manera en la que nos influye. Antes de llover a algunos le duele la cabeza, se vuelven irritables o pierden el norte, durante la lluvia viene la calma y después de la lluvia, esa melancolía dulce.
ResponderEliminarLos EBTG decían algo así como "I miss you like the desert miss the rain". Un abrazo.
Claudia, he encontrado lluvia, timida, pero me vale. Saludos.
ResponderEliminarSocióloga, el cupo de la lluvia nunca se cubre. Gracias por tus deseos.
Merce, en algunas fechas me ha pasado lo mismo pero da igual, el norte es una postal. Saludos.
Pilar, tú estas preparando un catálogo de lluvias, y de las que nombras me gustan todas. Saludos.
ResponderEliminarJulia, creía que habías abandonado, me alegra tenerte por aquí. He pasado cerca de Viella, esas montañas sobrecogen, y por lo que veo tú tienes más cosas interesantes para contar que yo.
Un abrazo.
Mariette, la lluvia es agua, dicen que es transparente y no huele a nada, pero yo no estoy de acuerdo.
Bienvenida.
bienvenido Stepp
ResponderEliminarBienhallada Pon.
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