15 de febrero de 2012

No censuréis la música



              Etapa oscura como pocas la del régimen de Franco en la posguerra, donde la censura surgió como azote moral y prevención del pecado. "Los bailes agarrados son un peligro para la moral cristiana", aseguraba el arzobispo de Sevilla que amenazó a sus sacerdotes con la suspensión de sus funciones si se atrevían a absolver a los que bailaban con fines pecaminosos. En la década de los cincuenta se hicieron famosos los carteles en los que se veia a una pareja bailando con la silueta del diablo superpuesta y un texto que rezaba: "Joven, diviértete de otra manera". Para los jóvenes de esa época, con las hormonas en estado de excepción, no solo era una diversión, era una necesidad que la dictadura les negaba, abocándolos a la represión sexual, a la castidad forzosa y al sucedáneo de las prácticas onanistas, corriendo el peligro de caer en la ceguera justiciera.
    
           El aparato del estado gestó un organismo llamado coloquialmente "la censura", que debía evitar que circuláramos por el lado salvaje de la vida, la derecha más rancia se puso las pilas, si señor. Si pudiéramos reconstruir algunos gags que montó la censura en esa época, Santiago Segura los rechazaría para su próxima película por excesivamente delirantes.
La dictadura consiguió traumatizar las mentes de varias generaciones de españoles, tratándolos como deficientes mentales y permitiéndoles avistar la vida solo desde ventanas muy pequeñas. No me sorprende que en los años setenta, miles de españoles no cinéfilos viajaran a Perpiñan para ver "El ultimo tango en París". Nosotros siempre hemos sido más proclives al aceite que a la mantequilla y sin ninguna duda esa fue la causa por la que se censuró la película en España.

          Como el control de la libido de los españolitos les parecía insuficiente, la censura arremetió contra la música que venía del infierno exterior, siendo objeto de un estudio minucioso; los perros de presa ladraban y las tijeras se afilaban.
Un clásico de la censura fue prohibir o modificar las portadas de los discos de vinilo. Al Sticky Fingers de los Stones, el de la famosa bragueta, le censuraron la portada que fue sustituida por una mano saliendo de una lata. Como repugnante, la portada "española" de Dedos Pringosos se llevaba la palma.
 
        En uno de los discos de Patti Smith, se podía ver una pipa de hachís y un lema que decia: Vive L´anarchie. Se colocó un adhesivo negro que tapaba ambas herejías, aunque este se podía despegar fácilmente, era del todo a cien.

           El Quadrophenia de los Who también sufrió el tijeretazo de la censura. En la carpeta interior se veía a un joven en la cama de su habitación y un póster de una chica desnuda, no se les ocurrió otra cosa que pintarle un biquini negro muy apañado a esa perversa fulana.
 Pornografía feroz que había que evitar a toda costa.

          La portada del disco Country Life de Roxy Music, tampoco pudo pasar el filtro: dos chicas en bragas deslumbradas por los faros de un coche. ¡Una de parches por favor! Podían pasar por lesbianas, y eso si que no.

          A Lou Reed, le birlaron el tema Heroin en su disco Rock and Roll Animal. En
 la portada del Diamon Dogs de Bowie, los genitales perrunos que aparecían discretamente en el dibujo del Bowie-perro, fueron pintados de negro. Todavía me pregunto si esos genitales podían escandalizar a alguien o solo a la mente calenturienta del censor.

        El disco Zuma de Neil Young, fue vetado en todas las emisoras de radio porque el estribillo decía: "Cortez Cortez, what a killer". Yo no se lo que hizo Hernán Cortés en América, pero aquí nos lo vendieron como un conquistador heroico, no como un asesino de aztecas.

       Donde realmente se lució la censura fue en el American Pie de Don McLean. Cuando cantaba: "..la santísima trinidad cogió el último tren hacia la costa", se introdujo una especie de pitido molesto para evitar que se oyera la blasfemia. ¡Menudos chapuzas!

                                                                                                              
                                      

13 comentarios:

  1. si no fuera por la terrible historia de este paísss hasta tendrían gracia las mil y una anécdotas que se pueden contar sobre la censura. Desde Gilda que algunos perjuraban que la habían vestido hasta ahora mismo que cadapoco tiempo con la Iglesia hemos topado.
    ...por no hablar del tema internet.

    ya pensaba que te habían censurado a ti, el título del post hacía presagiar lo peor. ;)
    un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Y aparte de la portada, al "Sticky fingers" le robaron "Sister morphine". Y "Aqualung" ni salió. Y "Electric Ladyland" de Hendrix era de un blanco inmaculado (salvo las letras en negro que indicaban el título y autor del disco) en vez de la magnífica selección de señoritas carentes de todo vestuario que posaban para la edición en el resto de Europa. Y el "Who's next" (los muchachos del grupo miccionando sobre un monolito) tenía una delirante portada española: el grupo tocando en directo. Con tan mala suerte que el fotógrafo se lió y puso el negativo al revés: los Who, de pronto, eran todos zurdos.
    Dicho ahora, todo esto resulta muy gracioso. Pero aparte de ser una vergüenza, fastidiaba lo suyo. Y lo único que conseguía nuestra querida Censura es que la gente comprase copias a puñados cada vez que iban afuera. Y que aumentase la leyenda de esos discos.
    Vamos, lo normal para la inteligencia de aquella dictadura.

    ResponderEliminar
  3. suave, en algunos casos, la censura, tapa con carteles lo que considera inapropiado para su moral. Lo censurado pasa a ser un listado de los "miedos propios" de esas "mentes calenturientas". Toda censura es cesura... y justifica su accionar por la provocación de "eso otro".

    ResponderEliminar
  4. Y que después nos digan que con Franco se vivía mejor, mejor ¿Cómo? No dejando entrar música que valiera la pena y tratándonos como ignorantes de todo, los cantautores se tenían que marchar, bueno, eran exiliados como poetas, actores de teatro, será casualidad, pero todo lo que tenia que ver con el arte se mandaba a la mierda.

    Ahora estamos mal, muy mal pero se puede respirar, gritar y salir a la calle para protestar.

    Un beso Steppen

    ResponderEliminar
  5. Senses, es cierto, siempre ha habido una tendencia de gobiernos y religiones a controlar lo que nos conviene, o mejor dicho, lo que les conviene a ellos. Podemos encontrar episodios en la historia en los que censuraron hasta los libros, en general. Con eso lo digo todo.

    Veo que te has dado cuenta que este post ha sido censurado y modificado. Donde dice: prácticas onanistas, decía pajas. No he tenido más remedio que aceptar.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Pas, yo sabia que a la censura española no le había gustado el texto de la contraportada del Aqualung "el hombre creo a dios a su imagen y semejanza", podían haber cambiado el orden de las palabras: dios y hombre, y arreglado. El que tuvo que vivir la censura seguramente no recuerda ese tiempo con especial alegría, y el que quería ver, se tenía que ir fuera de la guardería.
    Por cierto y hablando de censura, no te inquieta el texto de la zona superior del blog: "informar sobre mal uso". Como yo informe, aquí no va ha quedar ni dios.

    ResponderEliminar
  7. Claudia, la censura es el miedo de los propios censores y nos indican un camino, un tipo de vida que hay que vivir, y nada más, no hay más alternativas.
    Hace poco hablaba sobre el recorte de libertades de la mujer, esa que todavía hoy no puede votar. Es puro miedo.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Julia, ahora podemos protestar, si, es la pataleta del niño, pero pasan de nosotros casi igual como antes. Esto es una pseudodemocracia en la que nosotros apenas pintamos nada.

    La dictadura siempre ha perseguido el arte. Salvo a algunos estómagos agradecidos muy cercanos al régimen, los artistas siempre han sido para las dictaduras unos maricones y unos guarros obsesionados con el sexo. Ah, y unos rojos también.

    ResponderEliminar
  9. "La dictadura consiguió traumatizar las mentes de varias generaciones de españoles, tratándolos como deficientes mentales y permitiéndoles avistar la vida sólo desde ventanas muy pequeñas."

    Una larga noche .
    Que no se repita.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  10. ¿Será que de censores y de locos todos tenemos un poco o habremos progresado algo? Ahora pàrece que la censura viene en paquetes de SOPA cibernauta.

    http://enfugayremolino.blogspot.com

    ResponderEliminar
  11. Carmela, fue una larga noche, eso me han contado y espero que sigan existiendo noches, pero para hacer otras cosas.
    Un saludo.



    Laura, ¿Quién sabe? La gente se comporta de manera muy extraña cuando es censurada o se autocensura. Conocí a una concejal de cultura que presentando un libro, en lugar de decir prefacio dijo prepucio. En qué estaría pensando.

    ResponderEliminar
  12. En el "Live Killers" de Queen, el tema Dead On Two Legs. Justo en el inicio, también aparece censurado con esos pitidos tan sumamente horrorosos.

    ResponderEliminar

Steppenwolf